En el arte de la fabricación de botas vaqueras, existe una amplia gama de opciones de pieles para su creación. Cada tipo de piel tiene diferentes características y ventajas, así como una imagen y textura única que, si no conoces todavía, te platicamos a continuación.

Tipos de pieles para la fabricación de botas

Piel vacuna

Se obtiene de las vacas, es muy gruesa, lo cual permite obtener varias capas y su uso más común es en la zapa externa del calzado. Es suave al tacto y tiene un buen grado de rigidez sin perder maleabilidad, además, presenta un poco de grasa.

La piel vacuna es muy duradera y resistente al desgaste y perforaciones. A pesar de su resistencia, es muy transpirable y elástica, lo cual la hace ideal para calzado de uso diario.

Piel porcina

Se obtiene de los cerdos, es porosa, flexible y suave. No es de tanta calidad como la vacuna, por ejemplo, pero sí es muy duradera. En la fabricación de botas y otro calzado se usa comúnmente en el forro.

Piel de cabra

Este tipo de piel para botas y otros zapatos es de un bello y fino acabado, además de ser muy flexible y brillosa, lo cual la hace ideal para calzado formal. Existen dos variedades: tafilete, de grano fino, y dóngola, de grano grueso y brillante.

Piel de cordero

Esta piel es de las que más se usa en la fabricación de botas y calzado en general. Entre sus características están que es ligera, delgada y suave al tacto, lo cual la hace perfecta para el forro.

En Botas Doble R somos expertos fabricantes de botas vaqueras, nos ubicamos en León, Guanajuato. Puedes contactarnos por cualquiera de los medios disponibles para conocer nuestros modelos y precios.